«Miguelito, el rey de los pastelitos»
Miguel Aarón Echeverría Ontiveros, un histórico personaje yucateco, conocido popularmente como Miguelito, el rey de los pastelitos.
Falleció apenas el sábado 8 de octubre de 2016¡ luego de que en junio se difundió una falsa noticia sobre su muerte.
Con su muerte se apagó su conocido pregón para vender sus productos: “¡Que lloren niños, que lloren!”, tan conocido tanto en el parque Kukulcán como en las calles de la ciudad.
Miguelito, falleció de un infarto fulminante, en su casa de Umán, a los 77 años.
Formó parte de la historia del béisbol yucateco, donde durante décadas ofreció sus productos en la cueva de los Leones de Yucatán, acompañado de su ya famoso pregonar.
Retirado de la venta de sus famosos pastelitos, Miguelito vívió los últimos meses de la ayuda de sus admiradores y de tomarse fotos a cambio le algunas monedas y billetes en las cantinas que recorría ex profeso.
En su etapa final pagó la factura de los excesos que tuvo en su juventud, pues bebía y fumaba sin moderación.
En 1964 se sacó un millón de pesos en la Lotería, pero se gastó el dinero en la parranda y con mujeres.
Fue invitado a Miami para participar en el programa Sábado Gigante, de Don Francisco, pero en el aeropuerto no le dejaron pasar sus pastelitos, por lo que tuvo que ir sin ellos a contar su historia y gritar su pregón de batalla “Que lloren niños, que lloren”.