Vicente María Velázquez (Sanjuanistas)
Fundador de la Sociedad de los Sanjuanistas, el sacerdote y político Vicente María Velázquez nació en el popular barrio de San Juan de la ciudad de Mérida el 11 de abril de 1773, fue hijo del matrimonio formado por don Agustín Velázquez Novelo y doña María Alvarado Zapata.
Desde joven estuvo influenciado por el desarrollo de algunos integrantes de su familia en las filas de la iglesia católica, debido a ello inició su formación en el convento de San Francisco a la edad de 20 años, para finalizarla en el año de 1800 cuando fue ordenado sacerdote, asignándosele la iglesia de San Juan Bautista para desarrollar su labor pastoral.
Su formación humanista que había recibido María Velázquez, le valió para ganar adeptos entre quienes concurrían a la iglesia de San Juan. Entre estos se podía encontrar a Francisco Carvajal, Rafael Aguayo, Mauricio Gutiérrez, Manuel Jiménez y José Matías Quintana, con quienes fundó la sociedad de los Sanjuanistas entre 1805 y 1808, con la primera intención de rendir culto al santo de la iglesia que los acogía. Sin embargo al término de los servicios religiosos, el grupo de personajes gustaba debatir sobre el complejo panorama político y social yucateco, en donde el padre Velázquez compartía y causaba controversia con sus opiniones de corte liberal y en contra del dominio español vigente hasta ese momento.
La actividad y las opiniones vertidas en el círculo de los sanjuanistas se vieron abrigadas por la atmosfera que brindó la Constitución de Cádiz, cuando el 15 de noviembre de 1812 se efectuaron las primeras elecciones en Mérida, María Velázquez resultó electo para elegir al cabildo meridano. Fue a partir de ese momento que el trabajo de Velázquez se concentró en vigilar las leyes en favor de los indios, declarados hombres libres e iguales, sin obligación de pagar tributos a la iglesia y con derecho a la tierra para trabajarla. Sin embargo, los ideales perseguidos por el párroco se vieron truncados cuando el 27 de julio de 1814 se declaró la revocación de la constitución gaditana por mandato de Fernando VII, por lo que los adversarios de los ideales liberales, los “rutineros” aprovecharon para pasear a Velázquez por las calles de Mérida en medio de burlas ante la nulidad de la constitución, para después encerrarlo en el Convento Grande de San Francisco.
La Sociedad de los Sanjuanistas no se reunió de nuevo hasta 1817, cuando la mayor parte de sus miembros fueron liberados, sin embargo en esta nueva etapa fue Lorenzo de Zavala quien asumió un papel protagónico en la agrupación y María Velázquez abandonó dicha sociedad.
Fue así que el 25 de abril de 1828 en el seno de la ciudad de Mérida la edad de 55 años falleció Vicente María Velázquez, personaje que pugnó por la igualdad de oportunidades entre los hombres en suelo yucateco.