La profesora Rita Cetina Gutiérrez nació el 22 de mayo de 1846 en la ciudad de Mérida, fueron sus padres el coronel Don Pedro Cetina y Doña Jacoba Gutiérrez.

En sus primeros años, Rita vive con su familia las consecuencias de una lucha fratricida productos de las pasiones e intereses de las diversas facciones políticas (La Guerra de Castas), que ensombreció la paz social en Yucatán durante cincuenta años.

Recibió su primera instrucción en la morada familiar y en una de sus pequeñas escuelas particulares.

Desde muy joven se dedicó a la lectura de obras literarias e históricas, formación que la llevó a escribir breves poemas, cimientos de su reconocida obra poética a escala nacional.

A la edad de veinticuatro años, el 3 de mayo de 1870, fundó en compañias de otras dos damas del parnaso peninsular, doña Gertrudis Tenorio Zavala y doña Cristina Farfán, la primera escuela laica para mujeres, así como un periódico. Tanto la escuela como el periódico recibieron el nombre de «La Siempre Viva».

La escuela daba enseñanza gratuita y se sostenía con lo que producía el periódico. Los logros alcanzados por la maestra Rita Cetina Gutierrez en su escuela llamaron mucho la atención de las autoridades y en reconocimiento a sus méritos pedagógicos, fue nombrada directora del Instituto Literario de Niñas cuando esta escuela abrió sus puestras a la juventud femenina el 16 de septiembre de 1877.

Fue directora de esta institución liberal hasta marzo de 1879.

Por segunda ocasión se hizo cargo de la dirección del Instituto Literario de Niñas el 25 de octubre de 1886. Ocupó esta plaza muchos años.

Rita Cetina Gutiérrez trató siempre de despertar en sus alumnas, además de la vocación para el magisterio, las virtudes domésticas y la afición por las bellas artes y la música.

En 1902 se separó definitivamente de la dirección del instituto, herida ya por la enfermedad que la aquejó hasta el 11 de octubre de 1908, fecha de su fallecimiento en Mérida.