Andrés Eligio Quintana Roo, abogado, político, militar insurgente, periodista, literato y patriota cabal. Nacido en Mérida, Yucatán, en 1751, en el seno de una familia numerosa, compuesta por sus padres José Matías Quintana y María Ana de Roo y Rodríguez de la Gala, y sus cuatro hermanos. Con condiciones económicas favorables, Andrés realizó sus estudios primarios en su ciudad natal. Tuvo como maestro a Pablo Moreno Triay, hombre de firmes ideas liberales y fue condiscípulo de Lorenzo de Zavala y Manuel Jiménez, entre otros hombres que jugarían un papel importante en las luchas independentistas de México.

Teniendo veinte años llega a la ciudad de México en 1808 para estudiar leyes en la Real Pontificia Universidad. Rápidamente obtiene el grado de bachiller en Artes y Cánones, y para titularse como abogado hubo de ingresar en el despacho del Lic. Agustín Pomposo Fernández. En estas circunstancias conocería a su futura esposa y madre de sus hijas (Genoveva y Dolores), Leona Vicario, la cual llegaría a ser una importante insurgente.

Se incorpora al movimiento insurgente en 1812, bajo las órdenes de López Rayón. Y dada su mayor aptitud hacia la pluma, que hacia las armas, inicia la publicación de El Ilustrador Americano y posteriormente del Semanario Patriótico Americano, ambos de corte liberal insurgente. Don Andrés fue imbuido en las ideas liberales y modernas, en materia política, por su padre, su maestro y sus compañeros de estudios, en el contexto de las luchas locales del movimiento sanjuanista que tuvieron lugar en su tierra natal. Presidió el Congreso de Chilpancingo en 1813, momento álgido de la revolución de independencia, y momento político más importante de don Andrés. Firmó el acta que declaró la independencia del país respecto de España. No obstante, disuelto este por las fuerzas realistas y debido a los vaivenes políticos y militares de la guerra, hubo de vivir en adelante junto a su esposa en permanente exilio. Llegando a la decisión de aceptar el indulto real y vivir libres pero condicionados en Toluca.

Lograda la independencia del país, don Andrés tendría participación en el gobierno de Agustín de Iturbide como Ministro de Relaciones Interiores y Exteriores, pero fue procesado por abogar por la libertad de creencias. Fue magistrado de la Suprema Corte de Justicia, en el gobierno de G. Victoria. Llegado Anastasio Bustamante al poder se opuso al gobierno centralista de este, a través del partido Yorkino, grupo masón y de la publicación El Federalista Mexicano, mismo que fundó el 5 de enero de 1831. Pugnando constantemente en su carrera política contra los poderes absolutos y a favor de los contrapesos en la organización política del país. Con convicción patriótica también tomó parte en las pláticas ante el gobierno separatista de Yucatán, en 1841, cuyas negociaciones no serían reconocidas por Santa Anna.

Don Andrés Quintana Roo fallece por una afección pulmonar el 15 de abril de 1851 en la ciudad de México. No sin antes haber sufrido la pérdida de su amada esposa en 1842, y de ver tristemente la caída de la ciudad donde vivió tantos años en manos de un ejército extranjero en 1847. En 1900 fueron colocadas sus cenizas en la Rotonda de Hombres Ilustres y, en 1910, fueron trasladadas a la Columna de la Independencia como gesto de perpetuación de su memoria.